Brad Pitt se sube a la F1: la película que une Hollywood y velocidad, con Lewis Hamilton al volante creativo

Una superestrella de cine, un campeón de Fórmula 1 y una historia que mezcla adrenalina con redención. Así arranca la película que promete revolucionar cómo vemos las carreras: Brad Pitt se mete en el traje de piloto en una nueva cinta dirigida por Joseph Kosinski (Top Gun: Maverick) y respaldada por el propio Lewis Hamilton.

“Realmente sentí que la Fórmula 1 y el cine se encontraron”, confesó Hamilton, quien además de ser productor, asesoró en la parte técnica para lograr una experiencia visual lo más realista posible.

La historia detrás de la velocidad

El filme, aún sin título oficial confirmado pero popularmente conocido como F1, narra la historia de Sonny Hayes (Brad Pitt), un expiloto estrella que, tras un accidente que truncó su carrera hace 30 años, es convocado para regresar a las pistas con el equipo ficticio APX GP. La escudería, liderada por un excéntrico propietario interpretado por Javier Bardem, está al borde del colapso competitivo y necesita un milagro.

En medio del drama se encuentra Joshua Pearce (Damson Idris), un joven talento que desconfía del regreso del veterano. Lo que comienza como una rivalidad al límite, se convierte en una historia de mentoría, complicidad y redención.

Cine de alto octanaje

Joseph Kosinski pasó cuatro años desarrollando esta película, en colaboración con Apple TV+ y la productora Dawn Apollo Films, cofundada por Hamilton. El objetivo: capturar la esencia de la F1 como nunca antes en la pantalla grande.

Los autos que ves en pantalla no son efectos especiales. Son vehículos reales de F2 transformados para parecer monoplazas de F1, filmados en plena acción en circuitos icónicos como Silverstone, Suzuka, Budapest y Abu Dabi. Incluso se grabaron escenas entre prácticas reales de Grandes Premios, con los falsos pilotos compartiendo zonas de paddock con los verdaderos.

“Los espectadores quedarán impresionados: las imágenes son reales, la velocidad es real”, dijo Hamilton. “Queríamos autenticidad y contar una historia de amistad, trabajo en equipo y segundas oportunidades”.

Hollywood, F1 y un mercado estadounidense

El fenómeno Drive to Survive de Netflix marcó el camino. La F1 entendió que el cine puede ser un aliado clave para crecer su base de fans, sobre todo en Estados Unidos. Antes de la serie, solo había una carrera en territorio norteamericano. Hoy son tres: Austin, Miami y Las Vegas.

Con esta película, la Fórmula 1 busca consolidarse como fenómeno pop global. Y con Pitt, Bardem, Kosinski y Bruckheimer detrás del proyecto, parece que la pole position está asegurada.

🏁 ¿Te subirías a este monoplaza cinematográfico?

La combinación de drama humano, rivalidades reales, velocidad sin efectos digitales y la asesoría directa de Hamilton promete una experiencia única. F1, la película, no solo es una carta de amor al automovilismo, también es una jugada maestra para unir dos pasiones globales: el cine y la velocidad.